Marco Antonio Moreno – Consejo CientÃfico de ATTAC España
Jaque al Neoliberalismo
Tal como señalé hace casi un año en Los multimillonarios del mundo ocultan más de un tercio del PIB mundial en los paraÃsos fiscales, ahora, según la OCDE, en sólo 50 paraÃsos fiscales se resguarda el 25% del PIB mundial: más de 22 billones de dólares. Estos Estados se destacan por aplicar un régimen tributario muy favorable para empresas y ciudadanos de cualquier lugar del mundo, que normalmente suelen poseer grandes sumas de dinero, con una exención total o casi total de los impuestos que se aplican en los Estados con sistemas tributarios comunes.
En la lista de paraÃsos fiscales de la OCDE hay varios Estados dentro de la Unión Europea: Luxemburgo, Chipre y Malta; y paÃses más pequeños como Liechtenstein, Andorra, Mónaco o San Marino. Aunque la lucha contra estos paraÃsos fiscales no ha logrado grandes éxitos, desde los atentados del 11-S se puso en marcha una persecución más intensa sobre los defraudadores y se iniciaron conversaciones con las autoridades de estos paraÃsos para que colaboren en las investigaciones que demostraron que se habÃan usado paraÃsos fiscales con fines terroristas. El estallido de la crisis en 2008 acentuó estas exigencias y hasta los bancos suizos han comenzado a entregar listas con nombres de los multimillonarios que ocultan su dinero para evadir impuestos.
Las acciones de denunciar a los paraÃsos fiscales van en la dirección correcta de hacer justicia e impedir el lavado de dinero que se emplea no solo en el terrorismo sino también en el tráfico de drogas y de armas. Por ello que mientras cada dÃa la troika intenta resolver los problemas financieros de Europa con recortes y draconianos planes de austeridad, no queda más que decir que ese es un camino erróneo. Lo correcto serÃa perseguir a quienes han evadido impuestos durante décadas aprovechando las ventajas de los paraÃsos fiscales. Hacer hoy el cobro retroactivo por todos los años en que saquearon y engañaron a las finanzas públicas, aprovechándose de la confianza que inspiraban los mercados, serÃa un acto de gran justicia que ayudarÃa a detener este gran abuso masivo
El Blog Salmón