Los comuneros mapuche hacen urgente llamado a los medios y observadores de los derechos fundamentales de las personas a estar atentos frente a un posible nuevo desalojo de territorios ancestrales reconquistados por la Comunidad Tradicional de Temucuicui; al tiempo que hacen notar de que ello es consecuencia de la irresponsabilidad gubernamental y de los propioS colonos que han usurpado ese territorio.
Por: Comunicaciones Alianza Territorial Mapuche
En horas de esta tarde de hoy martes, y al tiempo que hace abandono del paÃs Chile el relator de la ONU sobre Terrorismo, Ben Emmerson, se han intensificado las operaciones de la policÃa militarizada chilena en las inmediaciones del territorio de Temucuicui, según informaron los representantes mapuche del sector.
Lo anterior, luego de que -por la fuerza de los hechos- se rompiera el muro comunicacional impuesto por el gobierno respecto del proceso de ocupación y trabajo de producción agrÃcola que desarrollan los integrantes de la comunidad de Temucuicui de los fundos La Romana, Montenegro y Gvloltraru, largamente disputada con weychan por esta tradicional comunidad de lucha. Los dirigentes mapuche, llaman especialmente a los observadores a que pongan atención ante un posible desalojo, ya solicitado por los terratenientes Urban y, frenado hasta hoy, sólo por la presencia del Relator de la ONU en Chile.
Finalmente, desde la zona se informa que los comuneros permanecerán en el lugar reconquistado, cuyas consecuencias son “de total irresponsabilidad del gobierno chileno que no ha concretado la solución de nuestra demanda”, reitera uno de los voceros desde el interior del terreno.
Para los mapuche vÃctimas del saqueo y larga explotación exprimida a estas tierras; resultan al menos curiosas las preocupaciones de los agentes de la SOFO y de las supuestas “vÃctimas” agrupadas para delinquir; respecto del “sufrimiento de la familia Urban”. Quienes, según los mapuches, hicieron de la esclavitud y el trabajo forzado mapuche una práctica habitual a lo largo de un siglo en el sector.