Con el respeto que me merece la pluma de don Valentín Justel –como asimismo la de cualquier otro escritor-, quiero expresar públicamente mi descontento por la manera como ha tratado el autor su poema “Soneto al Duero superno”. Lo considero conveniente por dos razones principales. El primer motivo porque estoy acostumbrado a que en “Metáforas” (escuela literaria donde desde hace una década aprendo poesía y prosa) se me critiquen mis trabajos, y en segundo (...)