Quiero acuñar esta palabra, monarcarada, con la finalidad de definir un acto volitivo que no tiene nada que ver con el deseo soberano del pueblo español, y sà con la decisión, en mi criterio arbitraria, del Gobierno y partidos polÃticos afines a la ideologÃa del PP, en relación con la abdicación de Juan Carlos I.
Con prisas y carreras (no sea cosa que, como bien ha dicho Raúl del Pozo en el espacio televisivo de hoy en la Sexta, “Al rojo vivo”, las (...)