Silencio obligado. La ley tácita, el viejo lema, ese que no esta escrito en ninguna parte pero que se cumple al pie de la letra, haciendo a un costado la responsabilidad de los informadores para hacer prevalecer la supervivencia en el medio. Es pan de todos los días, observar un comportamiento servil frente a cientos de detalles que superan la gravedad de la libertad de expresión por la libertad de conservación. Pese a los diferentes mecanismos que la tecnología hoy nos ofrece, el valor (...)