Aun no sintiéndome a la altura filosófica e intelectual del escritor Óscar Portela (amigo de las Letras y de la Verdad, a quien se le estima en MCH), me atrevo a comentar su artículo, cuyo título abre este escrito, comenzando por el final de tan agudo trabajo. En efecto, creo, como Poincaré, que "donde termina la física comienza la poesía". Siendo de esta manera –si es que la poesía, también pura matemática, nos puede desplegar hasta cierto punto la película de la esencia (...)