Un aplauso para la Unión Europea, con que la posteridad seguirá agradecida por su postura consistente, de suspender su ayuda desde el segundo día. Conmueve la solidaridad de México y por supuesto la de toda América Latina y las NNUU. Nunca antes en la historia han respaldado todas las naciones del mundo a un gobierno derrocado. A nadie se le escapa que, sin embargo, la posible solución o la degeneración del predicamento actual que vive Honduras pasa por un esclarecimiento de la política (...)